viernes, 9 de marzo de 2012

Algunas consideraciones sobre el aborto, I. Adolescentes y derechos

Habrá una nueva ley de regulación del aborto. Los políticos y tertulianos (con sus obscenos recursos “argumentativos”) tienen una nueva ocasión de airear sus tópicos al respecto en los tenderetes de la democracia. Como entre ellos, uno más, muy humilde, es un blog personal, yo también quiero airear mis manías sobre el tema. Empiezo por lo más pequeño.

El aspecto que menos se va a debatir estos días o meses es, desde luego, el hecho de que con toda seguridad desaparecerá de la nueva ley el punto que permitía a una joven de dieciséis años abortar sin necesidad de informar a sus padres o tutores, cosa que escandalizaba incluso a muchos votantes “socialistas”. ¿Cómo puede ser esto? ¿Puede la ley, legítimamente, obligar a una persona, no ya de dieciséis años, sino de catorce, doce o cero años, a informar a sus padres de que está embarazada? ¿Cuál es la justificación? ¿Podría, acaso, un padre o madre estar en potestad moral de obligar a una menor a tener un hijo, o a abortarlo? A mi juicio, esto no es más que un ejemplo clarísimo de dominación de los adultos sobre los menores. Puesto que estos últimos (todavía nadie sabe bien por qué) no pueden votar ni ejercer cargos políticos, no están representados directamente por las instituciones políticas ni por sus ocupantes, es decir, simplemente no están representados, como antaño no lo estaban las mujeres, cuando su representación estaba mediada por el varón (y como se dice a menudo que los parados no están representados por los sindicatos). Es evidente que los adultos, con esa inconsciencia además que acompaña a lo incuestionado, legislan según sus intereses de adultos, y es su interés (creen ellos) mantener el dominio sobre los menores. Mientras tanto, ningún adulto estará obligado a confesar a sus hijos que ha abortado, o que ha “cometido adulterio”.

Los y las menores pueden consolarse, no obstante, con ese consuelo que tienen siempre a mano los dominados (y es que siempre hay alguien peor que tú, porque la inferioridad es, como la materia misma, de la que es hija, infinita o al menos indefinidamente divisible): los no nacidos tienen aún menos protegidos sus derechos. No es solo que no tengan ni voz ni voto, es que tampoco tienen "ni voz ni voto".

2 comentarios:

  1. Es necesario infomar a los adolescentes sobre sexualidad, para evitar embarazos no deseados para mayor información te invitamos a http://www.supermujer.com.mx/familia/adolescentes/aborto-en-la-adolescencia.html saludos!!

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